Joao Mário

Finalizada ya la primera fase del Europeo sub-19 la sorpresa del torneo ha sido la eliminación de Portugal, que perdió el encuentro decisivo ante Grecia, quien acompañará a España en la siguiente fase. Sin embargo el combinado luso sí que estará en el próximo Mundial sub-20 por acabar tercero de grupo, sólo por delante de una Estonia que cómo se preveía, su nivel difería mucho con el del torneo. Y es que el equipo portugués cuenta con un equipo de grandes talentos, tales como el central Tiago Ferreira, el lateral diestro Joao Cancelo, el mediocentro Agostinho Cá, quien ya había destacado muchísimo con el equipo sub-17, y dos bandas rapidísimas como son las formadas por Bruma y Esgaio. Si a este equipo le sumas a un goleador como Betinho resulta lógico pensar que debían estar en semifinales, pero el 3-2 ante Grecia los dejó fuera para sorpresa de todos. Un jugador que me ha encantado y al que ya había podido seguir la pista con el filial del Sporting de Portugal ha sido su capitán, el centrocampista Joao Mário Naval da Costa Eduardo (19-01-1993).

Nació en Porto, una de las grandes ciudades del país y además donde el fútbol se vive de manera apasionada. Fue concretamente en el Oporto donde comenzaría a jugar al fútbol entrando en su filial con tan sólo 8 años. Curiosamente estuvo una única temporada, ya que en 2003 firmaría por el Sporting de Portugal y desde entonces ha permanecido en la ciudad lisboeta formándose y esperando que pronto le acaben dando la oportunidad en el primer equipo. Esta temporada ya jugó unos minutos en Europa League y se espera que en la temporada 2012-2013 tenga más protagonismo. Joao Mário ha sido siempre internacional en todas las categorías inferiores de Portugal, pasando por la sub-15, la sub-16, sub-17, sub-18 y ahora sub-19 donde es capitán y futbolista clave. Se espera que esté en el próximo Mundial sub-20 y durante este Europeo en el que a su selección no le ha ido muy bien él se ha marchado anotando goles aunque sea desde los once metros y demostrando una clase enorme con el balón.

Joao Mário es un centrocampista diestro de corte ofensivo pero con capacidad más que suficiente para generar juego y apoyar las jugadas apareciendo mucho en segunda línea. Mide 1'78 metros y es un jugador delgado pero fibroso, que utiliza muy bien el cuerpo para cubrir la pelota. Lo que más me fascina de él es la capacidad que tiene para aguantar el balón y cómo maneja ambas piernas para salir al paso en el regate con suma facilidad, con insultante tranquilidad. En un esquema de 4-3-3 suele jugar como interior por la derecha, siempre importante en las ayudas al lateral sobre todo en sus subidas y con algunas caídas a la banda, con movimientos que descoloquen la defensa rival, creando alternativas. Muy participativo en el pase, siempre tocando y moviéndose, con ofrecimiento y un trote continuo. Destaca por su velocidad y por su llegada arriba, tiene buen golpeo a balón parado y con el esférico en movimiento. Sobre todo gran técnica individual y esa pausa necesaria y capacidad para dar el ritmo preciso al juego. Debe mejorar cosas, a veces cae en la precipitación en la entrega y erra, tiene que estar más atento en ciertas fases del partido y precisar más en los pases. Pese a todo, me ha sorprendido gratamente la calidad con la que pisa y mueve el esférico, la cantidad de recursos que tiene para avanzar con el balón.

Es el hermano pequeño del jugador de Olhanense Wilson Eduardo, aunque este es delantero, también canterano del Sporting. A sus 19 años, Joao Mário es uno de los grandes activos de la cantera lisboeta y no sería de extrañar que pronto lo veamos mostrar su talento en los campos de la primera división del fútbol portugués. Un buen Mundial la temporada que viene en la categoría sub-20 podría ser su billete definitivo para convertirse en un futbolista a nivel profesional. Quizás una cesión a un club menor de Portugal podría venirle de perlas para seguir progresando.